Fuente: https://www.pv-magazine.com/
Las investigaciones indican que la mayoría de los vecinos de instalaciones de energía solar en Estados Unidos mantienen actitudes positivas hacia estas plantas hasta que superan los 100 MW de capacidad, o aproximadamente 400 acres.
Más de 10 millones de hogares en los Estados Unidos están ubicados a 1,6 km (1 milla) de los más de 8.000 proyectos solares a gran escala (LSS), según Energy Markets & Policy (EMP) del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley. Se espera que esta cifra aumente significativamente, a pesar de los esfuerzos de ciertos grupos por difundir falsedades y obstaculizar el progreso . La energía solar sigue siendo la forma más popular de electricidad en todo el país , a pesar de que su popularidad ha disminuido en áreas más conservadoras y rurales como resultado de ataques selectivos.
Para comprender mejor las percepciones de quienes viven cerca de instalaciones de energía solar, el equipo de EMP, en colaboración con la Universidad de Michigan, realizó una encuesta integral de 12 páginas que exploró 49 aspectos diferentes de vivir cerca de proyectos LSS.
Los datos solicitados a 4.974 hogares se publicaron en ‘ Percepción de los vecinos de proyectos solares a gran escala: resultados de una encuesta nacional ‘. El grupo compartió las respuestas de 984 hogares ubicados dentro de tres millas de 380 proyectos LSS únicos, y el 71% de estos hogares ubicados dentro de 1 milla de los proyectos.
Según el estudio de EMP, las actitudes de los vecinos se mantuvieron bastante constantes hasta que los proyectos superaron los 100 megavatios, momento en el que el sentimiento cambió drásticamente, mostrando una proporción de 12:1 de respuestas negativas a positivas. Esta fuerte oposición estuvo estrechamente vinculada a las preocupaciones sobre el impacto en la estética local, la calidad de vida general y las percepciones de injusticia en el proceso de planificación del proyecto.
En particular, sólo el 20% de los encuestados conocía los proyectos antes de que comenzara la construcción, y alrededor de un tercio descubrió la existencia de los proyectos sólo al recibir la encuesta. Aquellos que ven diariamente grandes instalaciones solares tenían muchas más probabilidades de expresar actitudes negativas hacia estos proyectos.
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